El «Silicon Valley» ruso y la visión española.

Hace unos días apareció en la prensa que Rusia tiene previsto crear un «Silicon Valley» a la Rusa. Para ello va a apostar fuerte; ha encargado a uno de los empresarios más influyentes del país, Victor Vekselberg, la creación de un Centro de Innovación y Alta Tecnología en Skolkovo al oeste de Moscú.

 

Para ello tiene previsto hacer que las empresas tecnológicamente más importantes de Rusia coloquen allí sus sedes, en especial sus departamentos de desarrollo e investigación. Las cinco áreas que ha definido el país para generar su desarrollo (cambio productivo a la española ¿?) son biomedicina, energía y ahorro energético, información, sistemas cósmicos y de telecomunicaciones.

Lo reseñable de esta iniciativa no es sólo que el Estado Ruso va a poner un montón de millones de rublos encima de la mesa para que funcione, sino que tendrá que hacer que la cosa funcione, es decir, de alguna forma debe incentivar a estas empresas a que realicen importantes inversiones (tanto de tiempo como económicas) para colocarse en el Centro. Además de generar las condiciones propicias para ello, como puede ser un tratamiento jurídico ventajoso (ya se planta así) además de beneficiar fiscalmente a los que acudan.

Pero quizás lo más importante es que el Estado actúe de lobby para presionar y «obligar» a que de verdad funcione y se cree un Centro de desarrollo importante.

Si pensamos en España, la cosa es un poco diferente; me viene a la cabeza las promesas de inversión y de creación de parques industriales tecnológicos que se le han hecho a las localidades con centrales nucleares para compensar el cierre de las mismas y por lo tanto la périda de riqueza que supondrá.

Si estamos viendo lo complicado que es y el esfuerzo que debe haciendo un estado como el Ruso para intentar desarrollar un Centro Tecnológico, ¿cómo es posible que se pretenda crear en zonas muy despobladas y alejadas (como son los pueblos donde se han instalado las centrales nucleares) centros de alta tecnología tan sólo poniendo unos millones de euros?.

La verdad es que no me creo que pueda funcionar, y más conociendo cómo está nuestro país y la más que previsible evulución empresarial. Las empresas tecnológicas que apuesten por crecer (de momento no tiene pinta de que sean muchas!!!) tienen miles de alternativas a la hora de elegir su posible nueva ubicación. Además todos y cada uno de los municipios se van a desvivir para que se asienten en su territorio.

De la misma forma, vemos que muchos municipios están planificando grandes actuaciones industriales pensando que con el mero hecho de construir un polígono industrial es suficiente para atraer a la industria.

El tiempo que es el que da y quita razones dirá.

De todas formas, no sólo es necesario desear que ocurra algo, también hay que empujar y dedicar muchos recursos (euros, esfuerzo, influencia,…) para que se convierta en realidad.