Acabamos de terminar el curso para la preparación para la obtención de las certificaciones PMP y CAPM.
Ha sido una experiencia muy positiva y gratificante, ya que los asistentes han colaborado mucho y han estado realmente muy motivados. A
demás lo hemos pasado muy bien!.
Este tipo de cursos tienen un factor diferenciador que lo hacen muy interesantes, y es que las personas que se apuntan, tienen experiencia profesional y conocen muy bien los problemas que a los que se enfrentan cuando tienen que gestionar un problema.
La base es el PMBOK.
Pero el hándicap de un curso de preparación para PMP puede ser que la metodología es un poco árida y puede llegar a percibirse como abstracta. Por lo que el reto es dar forma a las ideas y que los conocimientos teóricos se entiendan y se compruebe que realmente sí tienen aplicación práctica.
No hay que olvidar que el PMBOK, está basado en las experiencias que cientos de Project managers de todo el mundo y que se van recolectando y analizando. De forma que se seleccionan las que demuestran que han sido efectivas.
Por lo que la guía es un manual de buenas prácticas que han demostrado ser eficaces en la gestión de proyectos (y de todos los sectores).
Etapas que pasan los alumnos desde el inicio… hasta el final.
En este curso, he vuelto a ver las fases que prácticamente todos los alumnos van completando a lo largo del curso:
1. Ilusión y expectativas por conocer el método.
2. Saturación inicial; exposición de los grupos de procesos y áreas de conocimiento. Muchos conocimientos de golpe!.
3. Estructuración progresiva conforme se van viendo las diferentes áreas de conocimiento.
4. Dominio del modelo.
Un gran grupo humano!
En concreto este grupo, ha sido realmente bueno, no sólo desde el punto de vista académico, sino por el humano. Es en estos momentos cuando uno se siente realmente bien con el trabajo que hace.
Muchas gracias amigos!
Si te interesa el project management y certificarte en PMP o CAPM, puedes visitar la página de nuestro curso.