PMP: Qué aporta la certificación en Dirección Integrada de Proyectos a la empresa

Cada vez se habla más de las certificaciones en Dirección de Proyectos o Project Management, a la vez que el interés de los profesionales también aumenta, espoleados por un mercado laboral cada vez más exigente y competitivo donde los valores diferenciadores son, también cada vez más difíciles de encontrar.

A la hora de mejorar su cv en el área de la Dirección Integrada de Proyectos DIP mediante una certificación especializada, principalmente un profesional puede optar por diversas opciones; el grupo de Certificaciones de PMI, las de IPMA y Prince2. Sin menospreciar a ninguna, personalmente apuesto por PMI (Project Management Institute) y la PMP (Project Manager Profesional) por ser la más ampliamente reconocida a nivel mundial y en más industrias y sectores.

En este post, me gustaría analizar el punto de vista que tiene el mundo de la empresa sobre este aspecto formativo. En primer lugar, este tipo de certificaciones, aunan tanto la experiencia en Gestión de Proyectos como el conocimiento de las técnicas y herramientas propias de esta disciplina. Además, no son sectoriales, es decir su ámbito de aplicación es global y válido para poder afrontar proyectos de todo tipo.

¿Es lo mismo un máster en DIP que una certificación?

También, y antes de entrar a desgranar las facetas de interés para las empresas, es interesante analizar la posición de este tipo de certificaciones respecto a cursos especializados de PM, generalistas o sectoriales. En primer lugar, tenemos que saber que son cosas completamente distintas; si bien los másters son cursos de larga duración, en los que se trata con cierto detalle aspectos directos de PM, así como otras disciplinas transversales y centradas en el sector al que se dedica el mismo, en cualquiera de las certificaciones que hemos indicado anteriormente, para obtenerlas, hay que disponer de experiencia profesional previa, un perfil académico adecuado, además superar unas pruebas y previamente también realizar un curso impartido por una entidad de formación homologada (como ocurre con PMI).

¿Por qué a una empresa le conviene contratar a un PMP?

Evidentemente, si obtener una certificación en algo no añadiese valor al perfil profesional para la mejora de sus funciones en su puesto de trabajo, sería absurdo realizar el esfuerzo personal y económico para conseguirla, por lo que hay que partir de la base que en principio es positivo. Así, las razones por la que una empresa debería contratar a un Project Manager certificado serían:

  • Limita el intrusismo profesional y por lo tanto las sorpresas. En países con más tradición en PM quizás no sea tan importante, pero en España, no hay una carrera universitaria específica y pocos cursos de postgrado que impartan esta disciplina, y por tanto es desgraciadamente habitual ver como aparecen las palabras «Project Manager» en tarjetas de profesionales sin experiencia ni conocimientos necesarios para añadir valor a la gestión de proyectos.
  • Garantiza a la empresa que el profesional tiene unos conocimientos y experiencia tales que garantiza el conocimiento de técnicas de gestión de proyectos estándar que han demostrado su eficacia, por lo que si se aplican en sus proyectos, éstos podrán mejorar.
  • Sirve como canal de comunicación entre profesionales. Esto es muy importante si la empresa trabajo con equipos muliticulturales e internacionales, ya que al ser los estándares sobre los que se certifica un profesional, también internacionales y comunes, la comunicación entre los distintos equipos es más sencilla. Además, el uso de un vocabulario común de gestión de proyectos acelera la integración entre todos.
  • Homogeiniza los equipos de trabajo, de forma que si son equipos que se forman y tienen que empezar a trabajar juntos por primera vez, tienen una parte del camino andado al disponer de una base común. Y en caso se integrar nuevos miembros, éstos van a tener unas bases similares.
  • Para ser PMP se tiene que firmar un código ético.
  • Mejora la imagen profesional de la Compañía, por lo que aumentan sus posibilidades de conseguir contratos al poder aumentar la seguridad de sus cliente en el conocimiento en gestión de proyectos.
  • Finalmente, y lo que es más importante, el disponer de mejores profesionales, permitirá aumentar la eficiencia en la gestión de recursos, aumentando sus beneficios y mejorando su posición en el mercado respecto a la competencia.

¿Es suficiente?

Las certificaciones son cláramente generalistas, por lo que el cóctel perfecto que debiera buscar una empresa sería un profesional certificado en PM, y que además tenga formación específica y especializada en el sector donde tiene que desarrollar sus tareas, por ejemplo un máster sectorial.

Como conclusión, mi opinión es que las empresas que quieren mejorar sus forma de gestionar sus proyectos, deben fomentar, dentro de sus plantes formativos corporativos, la certificación de sus profesionales, de forma que aumente el conocimiento global de la Compañía.

Además de tener muy en cuenta en sus procesos de selección que los candidatos tengan conocimientos acreditados, y no hay en estos momentos nada más objetivo y estandarizado que las certificaciones en Dirección de Proyectos.